La cavitación se realiza por medio de un equipo de baja frecuencia que va a inducir a la formación de burbujas de vapor generando un calor localizado y produciendo la ruptura de la membrana del adiposito (grasa), liberando así los triglicéridos y emulsionándolos para ser drenados por las vías linfáticas y venosas.
Es un tratamiento ideal para moldear el cuerpo y mejorar el aspecto de la celulitis.