La piel sufre agresiones externas que afectan la calidad y lozanía de esta, generando un envejecimiento prematuro por factores como: el sol, el cigarrillo, mala alimentación, la contaminación. Por esto es muy importante realizar constantemente una limpieza facial para eliminar las impurezas, células muertas y radicales libres.
Durante este tratamiento se eliminan los puntos negros, blancos, pústulas y demás imperfecciones, realizando un proceso de oxigenación e hidratación por medio de equipos de alta frecuencia y mascarillas hidratantes y descongestivas.